lunes, 5 de octubre de 2009

No te salves

No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma.

No reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios.

No te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo.

Pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana.

Y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios.

Y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.



Mario Benedetti.

1 comentario:

Maria Jesús dijo...

Me encanta este poema de Mario, me encanta hasta tal punto de ser mi referente, "si pese a todo te salvas... no te quedes conmigo"
Impresionante!!

1abrazo enorme compañero!!!